¡PIMP MY RIDE! MEXICAN CURIOUS

TODO SE VALE. CUALQUIER COCHE CHICO, GRANDE O ANTIGUO, TODOS PUEDEN BRILLAR TANTO COMO LA DECORACION NAVIDEÑA DEL CENTRO.

Aguinaldo, caja de ahorro, tanda, vales y todo tipo de regalos han hecho de ti una persona superficialmente superior. Y por supuesto que no hay nada más satisfactorio que gastarlo en nuestro propio beneficio. Aquí dos recomendaciones para convertir la camioneta familiar en una limo de lujo. Padrotea a gustito en el “patas de hule”, consiéntelo después de tantos baches y manifestaciones que pasaron juntos, gratifícalo después de que lo abandonaste en la inundación para buscar refugio. Presúmelo camino a posadas, cenas de fin de año y serás el rey de las fiestas. Así las cosas:

DE MINIVAN A MAMIVAN

Roba la minivan de tu esposa. Como los niños están de vacaciones ella ni se dará cuenta si todavía esta estacionada o no. Llévala a DeBello Van para que le hagan el milagrito. Televisión para cada asiento, molduritas de madera en lugares que ni sabes que existen, asientos de piel y lo mejor, videojuegos ocultos en los paneles. No, lo mejor es la cama de atrás resguardada por persianas en todos cristales.

¿QUEMA MUCHO EL SOL?

Para que quedes como lanchero de la costa chica, hazle hoyos al techo de tu coche. En CristaKar te instalan la versión eléctrica de quemacocos Hebasto, marca alemana que le va muy bien a los subcompactos que están feitos, pobrecitos. Para algo más sofisticado, puedes ir a Sunroof, donde tienen el modelo perfecto para cada auto. Eso si, pide siempre cristal UV para que el bronceado no entre hasta el hueso.