Para que no te parta un rayo

Con eso de que los rayos andan cayendo ya no sólo metafóricamente, hay que saber cómo protegerse de ellos.

Febrero loco anda desatado y cobrando víctimas: el sábado un rayo mató a un inocente danzonero en la Ciudadela. ¿Así o más trágica la escena? No hay duda de que esta terrible anécdota quedará grabada en la historia popular chilanga, y desbancará aquella leyenda del dealer que en CU aseguró que su mercancía era "de la buena, si no, que me parta un rayo", y acto seguido ¡brum! Que se muere de idem manera.

¡Ay chirrión!

Para que tú no pases a la historia como célebre pararrayos chamuscado, te damos unos tips aplicables al Defe:

-Trépate a tu coche, al metrobús o a algún micro (o al metro, obvio), en vez de quedarte parado bajo un árbol, como los pobres danzoneros.

-Si de plano decides esperar estoicamente bajo la lluvia, y sientes que traes la suerte suficientemente escasa como para ponerte justificadamente paranoico, apaga tu celular: a los rayos les encantan las radiaciones electromagnéticas.

-Si vives en un penthouse, por favor no salgas al balcón a ver qué padre está tormenta.

-Es completamente falsa la creencia de que un rayo no cae dos veces en el mismo lado. Así que si estás en la Ciudadela y empieza a llover, no desafíes a la Ley de Murphy.

-Pero mejor no nos hagas mucho caso, vive tu vida y sólo preocúpate de las tormentas cuando andes de camping, porque la neta sí fue una desventura muy sui generis.

Checa esta página dedicada en su totalidad a los rayos (¿quién habrá tomado la decisón de hacer una página con ese tema?).