viernes, enero 05, 2007

LOS REYES MAGOS ANDAN SUELTOS

Todavía no se ha ido la luz del sol y las cocheras ya se convirtieron en locales con juguetes provenientes de los rincones más lejanos del mundo. El GDF se ha puesto benevolente y ha levantado (sólo por hoy) el programa de grúas para que automovilistas puedan estacionarse entre camellos y elefantes estacionados en doble fila sobre las avenidas. Nadie se queja.

El regalo que todos quieren
Los Reyes Magos andan buscando eso que ya no hay en ningún lado. No es burla. El Palacio de Hierro Durango vendió el último Nintendo Wii a las 15:45 hrs, acabando con las esperanzas de muchos. El encargado ha dicho que la sucursal de Santa Fe aún tiene algunos juegos empacados.

Pero en la calle hay juguetes más sencillos. Muñecas, autos a control remoto, cosas de baratija y alguno que otro de reconocida firma y dudosa procedencia. La muñeca “Bibi” (búscala con su rebaba de autenticidad) se ofrece por diez pesos. La más cara cuesta 500 pesos, "Bratz" con el empaque a medio abrir.

PUESTOS TARJETEROS. Acaban con tu dinero en un abrir y cerrar de ojos.

El puesto callejero de Juan Escutia y Circuito Interior tiene carreolas, enormes carros a control remoto. La gente lo ve y se detiene: presume ventas a meses sin interes con cobro a tu tarjeta de crédito en una cartulina.

Y para los que quieren encontrar todo en el mismo lugar, estará abierta toda la noche la juguetería más grande de México "Expo Tus Juguetes" en el Salon Maya I y II del World Trade Center. Con todo y cueva Mattel o el castillo del Mundo Barbie. Lo mismo harán supermercados, mercados y tianguis sobre ruedas de toda la ciudad. Como en el libro de Wally. Si las encuentras, ya ganaste.

Reyes a domicilio
Otros más asutos ya han pensado en buscar con ayuda del servicio nocturno de Servitaxis disponibles hasta las once de la noche. Esta "mensajería real" (obvio, exclusivo para Gaspares, Melchores y Baltazares) los asiste en la busqueda, compra y entrega a domicilio. La tarifa ya depende del nivel de dificultad para localizar el juguete, más el costo del mismo, multiplicado por el incesante cambio del taximetro cada 45 segundos. Nada barato el numerito.

Aún así, esta noche debes planear tu ruta de llegada a casa. Donde menos te imaginas encontrarás juguetes que invaden las calles. Esta noche la recomendación es la más parecidaa una contingencia ambiental: no salga a menos que sea estrictamente necesario.


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